Uno es el "Premio Dardo" que "resalta la defensa de todos estos valores ... la búsqueda del bien, de la justicia, de la libertad, de la defensa de la vida, de la solidaridad, de la igualdad en dignidad como personas, de sentido y el gusto de buscar lo mejor para el otro, como lo quiero para mí; de que haya bienes, oportunidades y distribución igualitaria para todos, tantos los que han nacidos en lugares más pobres, como los que tienen más, porque, en realidad, todo eso no es del Cesar, sino del único PADRE, común de todos, que es DIOS".
El premio me lo ha concedido desde su excelente blog "Salvador: mis vivencias e inquietudes", con reflexiones que recomiendo leer y disfrutar, que nos ayudan a discernir nuestras respuestas y toma de decisiones ante un mundo cambiante y desorientado:
Otro es el "Premio Apache 2009" que comparte desde otro de sus blogs "Yo soy creyente católico", donde plasma reflexiones de los acontecimientos díarios vistos desde la optica cristiana y alumbrados desde el Evangelio con la ayuda del ESPÍRITU SANTO.
Bueno, ahora falta poner un poco de mi parte, conceder estos premios, aquí le debo pedir perdón a Salvador, he tenido apenas tiempo para escribir estas líneas y corregir mis horrores ortográficos y gramaticales habituales, así que en otro momento concederé este premio como es debido a otros escritores que se esfuerzan mejor que yo en difundir la Cultura de la Vida.
GRACIAS SALVADOR!!!
1 comentario:
Gracias a ti, Pablo, por tantos elogios de los que no soy merecedor. Al menos, no quiero que me llenen de la tentación de mi propia vanidad, engreimiento y vanagloria. Y es que no quiero autoengañarme. Uno se siente tan halagado que puede ser que llegues a creertelo, como le pasó al cuervo con la zorra. Sólo quiero ponerme en MANOS del SEÑOR y abandonarme en ÉL, para dejarme llevar y sentir su Gracia y asistencia, como si de un martillo se tratara, en manos del un artesano. Jamás el martillo caerá en la tentación de sentirse alguien.
De cualquier forma, te estoy muy agradecido por tu palmadita y eso es lo que, en nombre del SEÑOR, quiero recoger con todo el cariño y el aliento que me es posible, para continuar, asistido por el ESPÍRITU, la tarea que el SEÑOR me y nos tiene reservado para cada uno de nosotros.
Un fuerte abrazo en XTO.JESÚS, y que DIOS te bendiga en unión de tu familia.
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